domingo, 5 de junio de 2011

No mas Australianos

No se si yo sea el indicado para contar esto, pero si no lo hago, algunos de ustedes nunca sabrán jamas lo que ocurrió en Chihuahua en un invierno.

No estuve cuando todos ellos llegaron y tampoco estuve el día de su muerte, tampoco se con exactitud como fue que llegaron, quien los invito, supongo que quien lo hizo pensó que se adaptarían a esta tierra y ellos por mas de 30 años nos hicieron creer que así era. 30 años es el limite de mis recuerdos, y en el mas antiguo de mis recuerdos ya estaban ellos, en esas imágenes del pasado, algunos se presentas como pequeños retoños de verano, ramitas apenas, otros tantos como jóvenes prometedores con algunos inviernos encima, y los restantes como adultos de orgullosas sombras y coronados con nidos de aves.

"Son Eucaliptos", me explico un tío, " y vienen de Australia". la gente se alegraba al pensar en ellos, decían que tenían un rico aroma y que no necesitaban mucho cuidado, poca agua para sobrevivir. Durante algún tiempo busque es sus copas la presencia de algún koala, si los trajeron de Australia, supuse que alguno vendría con ellos.

Recuerdo a las señoras que se levantaban temprano cada mañana a barrer el regadero de hojas en la calle, estos arboles las escupían durante todo el año, supongo que alguien se quejo, pero en esta tierra de sol, cualquier sacrificio hecho por una sombra o un por un manchon de verde que contraste con los ocres del horizonte, resulta insignificante.

Después escuche de la voz de algunos expertos, que sembrarlos había sido un gran error, que estos arboles degeneraban la tierra y que alrededor de ellos a aun amplio radio no permitían que creciera otras plantas, a la mayoría de los habitantes de esta ciudad no nos importo mucho ya que aquí crece muy poca cosa de la tierra y el efecto nocivo de los australianos no parecía alterar mucho la naturaleza de esta tierra. También dijeron, que algún día morirán que no eran aptos para este clima, pero nadie presto atención, ellos ya eran parte de esta ciudad, parte de los parques, de las calles, parte de las escuelas, parte de nuestras vidas.

En febrero de esta año, mientras el invierno se negaba a abandonarnos en una muestra de irracional ira de la naturaleza, el mas terrible frió jamas registrado, se estaciono durante 3 días en esta desértica región. se registraron hasta veinte grados bajo cero, una cifra inaudita para esta ciudad. nuestros sistemas hidráulicos y eléctricos fallaron y durante casi un mes el caos y la escasees interrumpieron nuestras rutinas. Nunca esta ciudad había estado tan consciente de su fragilidad. Cuando el caos cedió un poco fue cuando nos dimos cuenta, ellos habían muerto. todos y cada uno de los gigantes Australianos habían muerto, no soportaron el intenso frió. ahora presenciamos su funeral, las hachas y las moto cierras son las encargadas de la ceremonia mortuoria, caen uno a uno para convertiste en leña o en un banco en le patio de una casa. Nos han dejado desprotegidos a la sombra de su recuerdo, han dejando al sol y al cielo sin marco.

Serán remplazados por arboles de la región, álamos y huisaches.

No mas Eucaliptos en chihuahua.

El andre y su compadre Pancho

El andre y su compadre Pancho
Caluroso día de verano de 1914, poco antes de la toma de Zacatecas