viernes, 17 de abril de 2015

Tacos


Viernes por la tarde en la casa de Nuñez; Felix, el  hijo mayor de Maru, de escasos 8 años, regresa de su entrenamiento de futbol, Maru un poco ataviado con los quehaceres de la casa, pues en la mañana había tenido que extraer dos muelas que se aferraban a no dejar la humedad de su boca,


¿Como te fue en el entrenamiento Felix? -  a gritos saludo Maru desde la cocina a Felix.

 Muy bien mamá, fíjate que hoy el profe nos enseño a meter goles con la cabeza. - Contesto Felix mientras pateaba sus tenis para que se ocultaran detrás del sofá.

Ah que bien mijo, pero no quiero que dejes tus tenis tirados en la sala, recógelos y llévalos a tu cuarto. - Dijo Maru con un tono que dejo ver el fastidio de tener que repetir mil veces lo mismo.

Mamá el domingo tenemos juego. - dijo Felix mientra entraba a la cocina con los tenis en la mano. Va venir un equipo de otro club a jugar contra nosotros.

Que bien, ¿a que hora es el juego? - pregunto Maru

tenemos que estar en el arcup (1) a las 9, y el profe nos pidió que lleváramos una playera blanca, unas calcetas largas negras y dijo que no olvidáramos los tacos. -estas ultimas palabras apenas logro escuchar Maru, pues las voz de Felix se perdía en la escaleras.

¿Tacos?, ¿como tacos? ; ! Felix contesta ¡.-  ya no recibió respuesta.

El domingo llego, era una mañana soleada y el único rastro de la lluvia de la noche anterior era el pasto mojado del campo de fut, los expertos dijeron que era una buena mañana para jugar al futbol.
En el campo ya los dos equipos calentaban, un equipo blanco y el otro azul unidos por el amor al juego.
En las gradas los padres expectantes buscaban el mejor lugar para cubrirse del sol sin perder de vista a sus hijos. El profe observaba a sus pupilos calentar, cuando noto que una voz lo llamaba con apuro desde las gradas de padres, era Maru que con agustina sostenía una gran cesta.

Profe, este canijo chamaco no me dio bien el recado, así que traje lo que creí conveniente ¿,usted cree que con esto bastara ?.- destapo la cesta con un gesto tímido, y dejo ver una gran cantidad de tacos dorados, la mitad de papas y la otra de carne molida.

Pues...¿que fue lo que trajo señora?- confuso el profe vi los tacos

Pues tacos, Felix dijo que usted pido que trajeran tacos.- Maru se sonrojo cuando vio la enorme sonrisa burlona del profe.

Nooo... Señora, de esos tacos no.- el profe ya no puedo contener al carcajada. Yo les pedí tacos de futbol, los zapatos para jugar fut,

Los demás padres al darse cuenta de la situación también se rieron de buena gana.
Maru se sintió muy apenada de su torpeza pero al final se unió a las risas.

El equipo blanco fue apaleado por sus rivales azules mas experimentados, a Felix le costo mucho trabajo mantenerse de pie durante el juego, pues es imposible mantener el equilibrio sin el calzado adecuado sobre un césped mojado.
de cualquier manera el fue el héroe del partido pues terminados los noventa minutos de juego todos comimos de sus tacos.

(1) arcup:  es un club deportivo de nuestra infancia cuyas siglas significan asociación recreativa y cultural pajaritos

Perro Pug

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 En la esquita de Allende y décima, una pequeña construcción con aires del siglo pasado, se erige con sus ladrillos pelones y sus ventanas enmarcadas,  frente a la pasividad de un pequeño parque que ostenta en su centro los restos de una fuente que fue.
En esa equina desde hace una semana un perro pug, de torso aleonado y hocicos negro, observa la calle.

Lo vi por primera vez el lunes por la mañana; el martes creí que era un muñeco pues seguía en el mismo lugar y con la misma pose,:el miércoles me lleve una gran impresión cuando, al acercarme a lo que creía era un muñeco, se rasco la oreja con la pata trasera; el jueves lo observe por un largo rato y no se movió ni un centímetro; el viernes ya no estaba.

Para el sábado ya me había olvidado del perro, pero los pasos tambaleantes de la noche me llevaron a esa esquina, y lo que les digo no es mentira, el perro pug estaba ahí en el mismo lugar con la misma pose y con unos lentes oscuros observaba el pausado paso de las negra siluetas de la madrugada.

En definitiva... un mundo nos vigila.


El andre y su compadre Pancho

El andre y su compadre Pancho
Caluroso día de verano de 1914, poco antes de la toma de Zacatecas