Se
trata de las divertidas circunstancias en la que conocí a Jessica
Garcia y a Marcela Dominguez, dos integrantes del equipo de tenis del
ITCH, dos increíbles personas que me alegro haber conocido.
Pido
una disculpa, pero para evitar imprecisiones no manejare en este
relato fechas, siempre he sido malo para contar los días y si soy
capaz de recordar la fecha de nacimiento, es gracias tino de Andrea,
mi hermana, de haber nacido el mismo día que yo y de recordarme cada
año de la aproximación de esa fecha con los preparativos de su
festejo. Así que solo daré una aproximación para ubicarlos en el
en el espacio tiempo de estos acontecimientos que estoy a punto de
narrar, diciendo que fue en el año 2004 (Estoy 80% seguro) en la
ciudad de Torreón Coahulia en el marco del encuentro nacional
deportivo de los tecnológicos.
Mi
prime contacto con estas dos damas ( estoy tratando de imponer mi
imagen de caballero ) fue gracias a un desaire de mis compañeros de
equipo, que no tuvieron la voluntad de apartarme un lugar en el
camión que nos llevaría a torreón, debido a eso tuve que ocupar el
único lugar vació que quedaba al lado del representante en la
disciplina de ajedrez . Un tipo raro en todos los sentidos. su imagen
física no correspondía al estereotipo de un jugador de ajedrez,
joven mesurado e inteligente, al contrario, traía un corte de pelo
tipo guerrero moicano, mirada vivas es busca de alguien a quien
chingar y un léxico de albañil chilango en brama. No es que yo sea
asustado pero un jugador de ajedrez no debería ser así, además
que sus ronquidos me despertaron en tres ocasiones durante el viaje.
Después de eso decide quedarme despierto para vigilar que no se
escapara el tigre que guardaba tras los dientes.
Pero
no todo fue malo, después de que me convencí que no había ningún
tipo de bestia dentro de mi compañero me relaje y puse atención a
mi alrededor, y fue cuando me percate que Marcela y Jessica estaban
sentadas al lado, y cuando hice contacto visual con ellas note que se
reían y supuse que se burlaban de mi vano esfuerzo por evitar la
salida de la bestia de mi compañero. nos presentamos, y conversamos
un poco, digo poco por decir algo, pero con ellas no se puede
conversar poco, y no es que quiera decir que son muy parlanchinas.
pero ya lo dije. Mas bien digamos que siempre tiene algo que decir,
pero no se confundan las platica fue agradable, larga pero agradable.
En el viaje de regreso tuve el agrado de escuchar un monologo a cargo
de Marcela, no me quejo me dejo hacer unas cuantas intervenciones,
pero por desgracia la noche y la luna nos recordaron que teníamos
dormir y tuvimos que terminar con la charla.
Olvide
mencionar a dos personajes importantes en esta historia, la verdad
que su participación en el relato es mas bien como de escenografía,
parte importante de la ambientación, se trata de Ramón y Daniel,
este ultimo bautizado por el equipo de béisbol como Juan Damian, en
honor a un famoso jugador de beis Johny Daymon. Estos dos personajes
eran los restantes integrantes del equipo de Tenis varonil, y una de
sus peculiaridades (sino es que la única) era que casi no hablaban,
a tal grado que me tomo tres días convencerme que no eran mudos, era
sorprender en especial Ramon, que de alguno manera y supongo que le
tomo años de practica, desarrollo un sistema de comunicación a base
de señas y gestos, que le permite expresar opiniones, necesidades y
hasta sentimientos complejos, como la ira y alegría, con los matices
que estos conllevan, de modo que es posible saber, con un alto grado
de certeza que este estaba ligeramente mas enojado de que lo que
estaba hace dos horas. Lo mas sorprendente de esto es que este
sistema de comunicación era de tal simpleza, que el interlocutor
solo le tomaba unos cuantos minutos entenderlo. Todo es balido por
ese gran arte que es el silencio.
El
Juan Damian era mas “cotorrón”, se podía mantener una
conversación monosílaba con el y siempre decía hola al saludar y
adiós al despedirse. En una ocasión pude leer en sus labios la
unión de dos palabras " pinche madre " cuando fallo un
saque.
La
Marcela y la Jessica siempre se quejaban de ellos, decían que eran
unos mensos inútiles buenos para nada, ya que eran ellas las que
tomaban las decisiones y resolvían los problemas inherentes al
equipo de tenis. Mientras ellos se limitaban a encoger los hombros.
Yo
pienso que si son unos inútiles, pero que no tienen nada de mensos,
la táctica de hacerse los mudos es muy útil y cómoda. Durante el
viaje los observe detenidamente y puedo presumir que logre entender
la esencia de esa táctica, y la he aplicado exitosa mente. Es
cuestión de fingir que eres muy tímido para hablar y muy menso para
opinar, y la gente se compadece y te resuelve el problema.
Lo
difícil es cargar con la fama de inútil, pero despumes que superas
eso, todo resulta muy sencillo.
Uno
de los problemas que los mudos dejaron que resolvieran las damas
(regresó a mi el estado de caballero) fue el correspondiente a las
pelotas que se usarían en la competencias.
Para
los pocos conocedores existen dos tipos de pelotas en el tenis: las
de caja y las de bote.
Las
de caja no están presurizadas y se utilizan en lugares que se
encuentran a cierta altura sobre el nivel del mar y las de bote están
presurizadas y se usan en lugares que están al nivel de mar.
Con
el dato de las pelotas podrán entender el problema que se suscito en
la competencia. Pues resulta que cada participante debe llevar una
dotación de pelotas, las cuales se usaran durante el torneo, pero
como ya imaginaran la mitad de los participante no cumplieron con
este requisito de una manera adecuada, Se debia utilizar pelotas de
caja y muchos llegaron con pelotas de bote.
El
error no radico en falta de aviso, ya que los organizadores lo
hicieron con meses de anticipación, el erro radico, creo yo, en la
peculiar característica de los mexicanos a no poner atención a los
detalles y dejar todo al final. Es algo con lo que nacemos y durante
el crecimiento se fortalece; y como es imposible ir en contra la
naturaleza, llego a la conclucion de que el tenis de los
Intertecnologico siempre tendrá este problema.
Dejen
pongo un ejemplo: En el Tec. de Chihuahua, el encargado de comprar
las pelotas era el Prof. Dominguez (quien lo conozca no necesitara
leer lo que sigue, por que estará al tanto de la capacidad de
cometer errores de este honorable señor) recibió el mail que
indicaba los detalles de las pelotas a usar con un mes de
anticipación, y durante ese tiempo las damas del tenis, le
recordaron en repetidas ocasiones que no se olvidara de comprar las
pelotas tipo caja, a lo que el contestaba “no se preocupen ya les
pedí y me las envían en dos días”. Las pelotas llegaron 2 horas
antes de la salida y como se han de imaginar no eran de caja sino de
bote, y como no había tiempo para corregir el error tuvieron que
llegar con estas a la junta previa. Lo mas reconfortante es que no
fueron los únicos con las pelotas equivocadas, es mas eran tantos
que se unieron e hicieron un frente común para tratar de cambiar el
tipo de pelotas a usar, esta discusión se prolongo durante horas, y
al final la razón venció (aunque estuvo a punto no hacerlo) y los
del frente común tuvieron que tragarse el orgullo, admitir su error
y enmendarlo.
Yo
pienso que sin estas complicaciones, estos eventos no tendrían
chiste, y al igual que con los pelotas de tenis, la natación tiene
sus problemas inherentes a ella.
Me
refiero a que nunca estamos conformes con la temperatura del agua,
cuando no esta muy fría esta muy caliente, y cuando no es la
temperatura es el color del agua o las condiciones de los
arrancaderos, o cualquier otro detalle. Y siempre en cada evento,
alguien intenta boicotear la competencia. Pero por fortuna todo se
queda en malas intenciones.
El
reparto de habitaciones es un momento crucial en un viaje de este
tipo, las decisiones que se tomen en el lobby del hotel, definirán
el color de nuestra estancia, se crearan o fortalecerán amistades y
en el peor de los caso se romperán estas. Así que hay mucho en
juego. un mal compañero de habitación no te dejara dormir, o te
levantara muy temprano, tomara sin permisotus cosas, las perderá o
las romperá y lo peor de todo, borrara todas la fotos del viaje de
tu cámara el ultimo día por su incompetencia en el manejo de la
tecnología (Perdón Potro). A
todo
esto podemos agregar incontables situaciones que hacen de un
compañero de habitación la mas grande pesadilla en un viaje, pero
desiste de esta tarea ya que no terminaríamos de hacerlo.
Debo
ser justo, y mencionar que el Prof. Dominguez a pesar de todas sus
incompetencias en este asunto de organizar las habitaciones es muy
bueno, toma decisiones salomónicas bajo mucha presión y en poco
tiempo y al final resultan muy pocas heridas por sanar.
En
el proceso de repartición de habitaciones siempre se lastiman
sensibilidades debido al rechazo. esta situación se presenta cuando
la cantidad de miembros de un grupo de amigos es mayor a la capacidad
de la habitación y menor a un múltiplo de dicha cantidad, por
ejemplo cuando el grupo esta formado por 5 personas y la habitación
solo tiene capacidad para 4, entonces es necesario rechazar a uno. en
este caso el rechazado se ofenderá con los otros miembros del grupo,
y se perderá la armonía de dicho grupo, esta situación se empeora
con el hecho que en al delegación del Tec. de Chihuahua, por lo
general esta formado por mas mujeres que hombres, y como sabemos las
mujeres son como un amplificador de este tipo de broncas.
En
un viaje a los Mochis nosotros tuvimos que rechazar a el Clift. La
habitación solo tenia capacidad para 4 personas y fue ocupada por el
Huetzin, Joy, checho y yo. Como el clift era el mas novato, tuvo que
conciliar el sueño junto con el de Charli ( El chofer estrella del
tec). La verdad el clift lo tomo muy bien, casi no se quejo, excepto
por el instante en que le dimos a conocer la decisión que se había
tomado, solo dijo “que culeros”, tomo sus cosa y se fue. Los
siguientes días se comporto como si no hubiera pasado nada, claro
que en las mañanas nos despertaba a las 6 de la madrugada, creo que
fue su manera de vengarse.
En
Torreón la capacidad de cada habitación era de cuatro personas, y
la repartición quedo de la siguiente manera: Equipo de basket
varonil en 3 habitaciones, Equipo de Atletismo varonil en una, equipo
de de béisbol en 6, los mudos compartieron al habitación con el
moicano ajedrecista y su habitación quedo en medio de las
habitaciones del beis bol. Esta situación geográfica derivo una
gran amistad entre estos dos grupos, a tal grado que los mudos
abandonaron la protección materna que les proporcionaba sus
compañeras de equipo y regresaron a Chihuahua en el Tanoricamion (
el camión que llevaba el equipo de de beis en exclusiva y cuyo
nombre derivo en honor al coach del equipo de beis el señor Tanori).
El equipo de voleibol femenil ocuparon 3 habitaciones, cerca de la
habitación ocupada por nosotros (el glorioso equipo de natación
varonil, Potro, Checho, Joy y Coatza su servidor), el equipo de
natación femenil ocupo una habitación (Marcela, Marisol, Tita y
Norma) pero fue necesario rechazar a Pamela, a la cual no le importo
mucho compartir la habitación con las chicas del tenis.
Esta
ultima habitación guardo dos misterios que no pude resolver en toda
la estancia en Torreon, y hasta la fecha quedan como un fracaso para
mi mente deductiva. El primer misterio efue la ubicación de esta
habitación, nunca supe donde estaba, ni siquiera me entere del piso
en el que estaba; y no solo yo, muchos si no es que todos los que
tomamos parte de ese viaje nunca supimos la ubicación. Podríamos
pensar que esto acarreo un problema de comunicación con la ocupantes
de la habitación, pero misteriosamente no fue así, cuando teníamos
que hablar con alguna de ellas, en ese instante se recibía una
llamada de ella, cuando se hacían juntas con el entrenador del
equipo Pamela se aparecía en la junta a tiempo si haber sido
avisada.
El
otro misterio es sobre una rara epidemia que ataco a dos ocupantes de
esa habitación, un ataque intenso de calambres, que afecto a Marcela
y a Jessica. La verdad que nunca se quejaron frente a mi sobre el
ataque de calambres y tampoco presencie un ataque, pero mi
desarrollado sentido de deducción me llevo a esa hipótesis, ya era
impresionante la cantidad de plátanos que consumían esa dos menudas
mujeres. Tanto que llegue a pensar que tenían un gorila escondido en
su habitación y que esa era la razón para mantener en secreto su
ubicación. Pero el hipótesis de gorila escondido, al cabo de varia
horas de pensamiento profundo, me pareció ridícula y que quede con
el ataque de calambres.
Dejen
narro mis observaciones; en el desayuno yo llegue a contar que se
comían cada una cuatro plátanos, dos en el cereal , otro como
desenpanse y el otro como lonche para el camino. En la comida se
echaban uno como postre y un segundo de nuevo como lonche para la
caminata del comedor al hotel, y en la cena se comían otro dos nomas
para no dejar. En algunas ocasiones no tenían tiempo de comérselos
y se llevaban la penca completa, ellas decían que eran para cuando
hubiera “chance”. Yo ofrecí mi ayuda en repetidas ocasiones a
cargar con semejante equipaje a constas de mi propia dignidad, todo
sea por la caballerosidad.
Los
duelos de tenis iniciaron muy bien para nuestra delegación, los
mudos pasaban sin dificultad sobre sus adversarios como ángeles de
la muerte, silenciosos y contundentes que no permiten tregua alguna.
Hasta que Ramón se topo con en jugador de raquet que improvisaba su
tenis, confundiendo a Ramon y dejándolo fuera de las medallas con un
5 lugar de consolación. El Juan Damian llego mas lejos, peleo por el
tercer lugar contra su compa de Juarez, pero no pudo vencer y se
conformo con el cuarto.
Las
damas al igual que los mudos empezaron muy bien ganando todos sus
juegos, lo que les permitió llegar hasta semifinales, la verdad no
era de extrañar estas traían muy buen nivel, y la competencia se
enfocaba en solo tres jugadoras, nuestras dos heroínas y una
chaparrita de puebla (por cierto muy piernuda) que desde el principio
era la favorita. No había mas competencia todos asegurábamos que
entre ellas se repartirían los tres primeros lugares, pero no
contábamos con la mala surte, mas bien con la mala surte que
acompaña el descuido, para arruinar los pronósticos.
Todo
empezó mal cuando la Marcela tomo la decisión de dejar sus tenis
viejos y usar unos nuevos, eso nunca se debe hacer, en una
competencia de ese nivel no se debe estrenar nada, pues resulta que
los tenis nuevos le quedaban un poco grandes lo que provoco que cada
ves que frenaba bruscamente su carrera, sus dedos gordos chocaban
contra los tenis, y después de tres juegos tenia las uñas moradas,
esto le provoco mucho dolor que el impidió correr con libertad,
parecía (como ella declaro un año después mientras me mostraba la
consecuencia de ese descuido ) un gallo espinado, después se le
junto una lesión en el hombro derecho. Para validar mi teoría de
la mala suerte, a todo eso agreguen los ataques de calambres, y
tenemos una colección de achaques que mermaron la capacidad de juego
de Marcela. A pesar de todo esto, ella llego a la semifinal contra la
representante de Queretaro; mujer güera de grandes zancadas, poco
atlética, de torpes movimientos y mucha fortuna. El juego estuvo
reñido pero fue imposible para Marcela, convertida en un yonque,
vencerla.
Jessica
tuvo mas suerte, los plátanos hicieron su trabajo y se libro de los
ataques de calambres , y pudo jugar con mucha desenvoltura, llego a
al semifinal, y se enfrento contra la chaparrita piernuda. Como se
dice en el ámbito deportivo, este encuentro fue una final
adelantada, el mejor juego de la competencia (pero no el mas visto,
este vendría después) estaba tan parejo que parecía que nunca
acabaría , el final tuvo tintes de un juego de volados. la piernuda
gano y ella paso ala final.
Como
ven, el destino enfrento en el juego por el tercer lugar a nuestras
dos heroínas y he aquí la crónica de este juego.
Fue
un día que amaneció temprano, el solo calentaba lentamente la fría
mañana que dejo la noche tras su paso, hasta convertirla en una
agradable mañana para jugar tenis. Baje temprano al lobby y espere
por 5 minutos a las que serian las protagonistas de esa mañana, El
camión cubrio sin prisa la distancia que separa al hotel del centro
deportivo. Observe detenidamente el calentamiento de mis nuevas
amigas y noto las molestias que achacan a Marcela, no hubo milagro en
la noche. Por algún motivo (tal ves la prisa) se programan los dos
juegos, la final y el juego por el tercer lugar, al mismo tiempo.
Inicia
el espectáculo. El publico duda un instante, ¿que juego es mas
digno de ver?. La mayoría se decide, atinadamente, por el juego del
tercer lugar; en parte por que la chaparrita piernuda destroza sin
piedad y sin resistencia a la güera de grandes zancadas y por otra y
no es por ser adulador, mis amigas resultaban ser las mas guapas de
la competencia y como la mayoría del publico eramos hombre, pues
imaginen.
Jessica
sirve sin piedad, y pelea cada punto como si su vida dependiera de
ello, Marcela por su lado se olvida momentáneamente de sus achaques
e intenta hacer mucho daños con sus golpes, un juego digno de
enemigas, donde se hablo poco y se jugo con mucho esfuerzo y
sacrificio. En el primer descanso se dirigieron a sus sillas, yo
pensé que no se hablarían tras ver la poca compasión que tuvo
Jessica por el estado físico de Marcela orillándola a jugar mas
allá de sus posibilidades, Pero no, se pusieron a platicar para
corregir los errores de la otra, mientras Jessica daba un masaje a su
amiga el hombro lastimado, siguió el juego con la misma falta de
misericordia la una por la otra, de ves en cuando marcela se acordaba
de sus pies de gallo espinado y daba unos brinquitos de dolor, para
seguir jugando como si no pasara nada. El otro juego termino y el
publico se concentro en este. En el segundo descanso mientras se
corregían mutuamente y Jessica daba masaje al hombro de su amiga,
recordó que su amiga también estaba lastimada del pie y la obligo a
quitarse el tenis para darle un masaje. este cuadro provoco algunas
risas entre el publico, pero ellas las ignoraron y siguieron con los
masajes. El resultado le dio el triunfo a Jessica.
Es
un juego digno de recordar, amigas que se destrozan en la batalla y
enemigas preocupada por curar las heridas de la otra. Marcela con
los birnquitos de gallo espinado y Jessica preocupada por no saber
que masajear, si el hombro o el pie de su enemiga. Un grupo de
espectadores que decidieron ignorar el juego de la final, solo por
que los protagonistas de este eran mas guapas que el otro.
Mientras
que dentro de la maleta asomándose para no perder detalle del
partido un bote de pelotas no abierto acompaña a un plátano que se
alegra por no haber sido devorado por sus captoras.